Debería ser al revés. Y ahora, cuando llegamos al final del curso, hacer las cosas con más sosiego, saboreando lo que ha sido todo este trayecto. Nada, que acabamos deprisa. Y la próxima semana ya tenemos los biblioforos, esa charla sobre vuestro trabajo. Sí, hoy los he llamado charla y he notado alguna sorpresa en quien los considera exámenes. Sí y no.Cerrar con Martín Gaite ha sido un placer. Y un placer ver algún rostro con ganas de salir de clase y de coger la novela para leerla. Gracias. Aquí seguimos.
Pongo aquí un vínculo a una página con información sobre CMG.
4 comentarios:
Todos, alguna vez en nuestras vidas, nos hemos encerrado en cualquier cuarto, bien de delanto o de atrás, pero en un cuarto. En su insomnio veo el miedo, la soledad, la locura, la cordura, la tranquilidad de otros...
Acaba otro curso esperando que acaben más.
Un saludo
Demasiado sarcasmo en cmg.
Hola, Profesor Lama.
Hacía mucho, mucho tiempo que no miraba este tu cuaderno y hoy, al leer lo de las charlas-exámenes, he vuelto a recordar (una vez más, pues lo hago a menudo) la que quizá fuera una de tus primeras experiencias en esas lides. Uno de estos junios atrás, en la vieja Facultad, cuando no había actas electrónicas y Félix el telefonista, con sus zapatillas de paño, ponía las papeletas con las notas de las asignaturas en una mesa frente a consejería -¡O tempora, o mores!-, como decía, hace ya algún tiempo subí a tu despacho porque no estaba de acuerdo con la nota que me habías puesto. Tras algunas explicaciones, finalmente subiste el medio puntillo que me faltaba para el notable, con la condición de que tenía que presentarme al examen de Septiembre, aunque sólo con una de las lecturas del año, que la tenía muy flojita : "Paisaje despues de la batalla". Y cuando llegó el día tuve el placer de disfrutar de mi primer y único examen-charla: más de una hora comentando el libro y otros muchos asunto más. Lo dicho: un verdadero placer.
¿Comtempla Bolonia la instauración de tan sana y recomendable constumbre?
Gracias y un saludo, maestro.
Muchísimas gracias, de verdad. Es muy gratificante el recuerdo.
¿Bolonia? Bolonia todo lo contempla como si fuese una novedad. Ahora han descubierto que lo de la transmisión de conocimientos no debe ser lo único. Y algunos llevamos veinte años intentando otras cosas...
Gracias por el recuerdo de aquellos tiempos. Ojalá no nos volvamos agriamente nostálgicos y podamos seguir disfrutando de la enseñanza de la literatura en unas condiciones razonables.
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